Raya, la aplicación de citas enfocada a las personas más ricas y famosas del mundo, fue fundada en 2015 por Daniel Gendelman prometiendo garantizar la privacidad de sus exclusivos clientes, por lo que crearse un perfil en esta plataforma no es tan sencillo, pero tampoco imposible.

En un momento en el que la privacidad de los usuarios se ha vuelto un problema en la mayoría de redes sociales, Raya se posicionó como un análogo a Tinder, pero para personajes públicos que no quien comprometer su seguridad. Multimillonarios, estrellas de cine o famosos deportistas la usan y son considerados "los miembros de una comunidad", según el sitio web de la plataforma.

El costo de la membresía mensual actualmente ronda los 9 dólares y de momento la aplicación está disponible solo para IPhone, pero lo más complicado es que un nuevo usuario sea aceptado, ya que es necesario pasar por varios filtros. Según algunos informes, el porcentaje de aceptación es de aproximadamente el 8 %, con más de 100.000 solicitantes en la lista de espera.

En primer lugar, el aspirante debe tener una cuenta de Instagram activa y al menos una referencia de alguien que ya esté usando la aplicación. Después, las solicitudes son calificadas por un algoritmo y "un comité de cientos de miembros" de varios lugares del mundo. Luego solo resta esperar la aprobación, que puede durar días o incluso meses.

Y aunque el fin de Raya es ayudar a interactuar con nuevas personas que buscan una relación o el amor de su vida, no todas las celebridades que la han usado han tenido una experiencia del todo gratificante. Tal fue el caso del actor estadounidense Ben Affleck, quien fue rechazado por una 'tiktoker' conocida como Nivine Jay al creer que su perfil era falso.

Otro polémico incidente con esta aplicación lo vivió el actor de 'Friends' Matthew Perry luego de que una usuaria publicara un video de una cita virtual que tuvieron cuando ella tenía 19 años. Dicha acción le costó a la joven la expulsión de la red social, pero ella alegó que se sintió incómoda al hablar con alguien tan mayor.

"Se sentía un poco extraño hablar con alguien de la edad de mi papá y simplemente no se sentía bien, especialmente cuando él sabía lo joven que yo era. Honestamente, no está bien que los hombres mayores hablen con chicas tan jóvenes", acotó.